Queridos amigos y fans,
la Reynols esta semana se ha puesto seria. Depues de mis exámenes parciales (en los que he tenido que hacer gala de mis trucos mas sucios en los mas oscuros despachos), me he ido a hacer la revolución.
Ah! que recuerdos me trae de aquellos finales años 60, cuando una ola de creatividad y de rebeldía acabó con el orden establecido. Aunque nadie lo sabe, algunos de los desnudos que salieron escandalosamente aquellos dias en ciertos fotogramas deCahiers du Cinema eran mios, yo fui musa de grandes como Godard, Truffaut, Resnais….
Luego todo se fue malogrando, ser madre de mi hija lola acabó con mi escultural desnudo y mi carrera profesional, y caí en el alcohol. Aun algunas noches le sigo pidiendo a mi yerno Javi que «me ponga un güisquito….»
En fin, a lo que vamos. Que yo, Estela Reynolds, de manera desinteresada y en colaboración con estos dias tan locos que nos traen estos jovencitos indignados, publico en el internés este que llega a todas partes, un texto que escribe un buen amigo y que requiere de mi fama y mis contactos para que llegue a todos los que participan de la «espanisRevolushion».
Ahí va.
Quizás de pequeños alguna vez leisteis algun tebeo de Tintín, ya sabeis, ese periodista rubiales que iba con un perrito blanco. Es posible, aunque poco probable, que en vuestras manos cayese un número llamado «Tintín y los Pícaros». Tanto para los que lo leyeron como los que no, les refresco la memoria.
Finales de los años 70:Tintín y sus amigos son invitados a la ciudad de Tapiocápolis, capital de una república bananera imaginaria situada en centroamérica. La ciudad recibe su nombre del Coronel Tapiocca, un personaje soberbio y vanidoso, el cual ha instaurado recientemente un poder militar totalitario mediante un golpe de estado al General Alcázar, anterior presidente y amigo del protagonista.
Alcázar, por su parte, ha tenido que huir a la selva, donde se refugia con un puñado de leales al gobierno anterior. Éstos son denominados «pícaros» por parte de Tapiocca.
A lo que voy es que, si recordais, el mecanismo que tenia Tapiocca para reprimir y diezmar las fuerzas de los rebeldes «pícaros», no era otro que lanzar desde aviones enormes cajones con paracaídas. En los cajones, centenares de botellas de»loch Lomond», uno de los mejores Wiskies escoceses de la época. De esa manera, Alcazar se encuentra en mitad de la jungla con un ejército de borrachines que empalman borracheras con resacas, que no dan pie con bola, que se dedican a desperdiciar munición disparando al aire y que son incapaces de hacer nada práctico.
Finalmente, el científico Tornasol inventa unas pastillas que mezcladas con la comida hace que nadie que las tome pueda probar gota de alcohol. De esa manera consiguen llevar a cabo una revolución sin derramamiento de sangre y derrocar al cruel Tapiocca del gobierno.
Años 90: En España, país con un clima benévolo, se comienza a popularizar el fenómeno del botellón, en cierta manera un aviso, ya que miles de chavales deciden hacer uso del espacio público en sus ratos de ocio, incapaces de pagar cantidades exorbitantes por una copa de garrafón. Finalmente, este uso se convierte en un abuso y los gobiernos locales atajan el problema por la via de la Sancion Administrativa: Si bebes, Pagas.
Año 2011. La sociedad Española, harta de los abusos y excesos de la clase política de su país, y en especial los jóvenes, con un 42% de paro, decide revelarse. Durante la semana previa a las elecciones comienza una manifestación pacífica que pronto crece como una mancha de aceite y contagia a todo el país primero y al resto del planeta después.
La gente queda sorprendida por lo rápido, lo tranquilo, y lo bien organizado de una revolución iniciada por la llamada «generacion perdida», una generación «del botellón» que aparentemente era incapaz de luchar por nada, y que estaba demostrando que podia salir a la calle y no a beber, que podia salir a la calle y recoger su porqueria si se lo proponia, que podia salir a la calle y organizarse en asambleas por todo el pais, que podia salir a la calle, harto, y cambiar la historia de la «falsa democracia».
No obstante, los detractores de esa revolución tranquila se escudan en que aquello no es mas que un «botellón festivo venido a más».
Y yo digo:
– No les des ni un motivo para que puedan opinar eso
– No pasa nada por salir una noche a la calle y no beber. Demuestra que no solo eres generacion del botellón.
– Mantente al 100% de tus capacidades, bastante desgaste es tener que dormir en la calle (por culpa de un gobierno que nos quitó la vivienda)
– Si no bebes, dinero que te ahorras.
– Si no bebes reduces residuos, principalmente de vidrio y metal, que son de los que mas energia requieren para su fabricacion
– Si bebes, es posible que digas barbaridades o tonterias de las que al dia siguiente te arrepientas/no recuerdes. Esta es una revolucion pacífica
– Si bebes, probablemente lo hagas porque le has comprado una lata a un Chino o un Paquistaní. Comprandoles fomentamos una economia sumergida y sin derechos laborales de ningun tipo , controlada por ciertas mafias que explotan a inmigrantes.
No fomentemos ni el «botellón» ni el «latón».
– Si bebes agua, la organización de sol reparte agua gratis (si, el agua es un bien necesario para la vida, como la vivienda, y deberia ser gratuita)
Por cierto, cuántos vendedores de alcohol habia estas ultimas noches, no? ¿serán enviados del gobierno, como los cajones de whisky del Coronel Tapiocca?
Evidentemente, eres libre de hacer lo que quieras, solo te pido que tengas en cuenta estos argumentos y que «reflexiones» sobre ellos.
Un saludo de un amigo que solo quiere que esto salga bien.
Por favor Reenvia.Remezcla. Reimprime. Recorta y pega.
Nota de prensa final: La reynolds, comprometida con la causa de la Revolucion, se ofrece para dar placer y descanso carnal a cuantos masculinos y aguerridos manifestantes deseen. «Pobres muchachos, es que estar acampados en la calle y sin poder echar un «quítame ahí esas pajas» no es vida» ha añadido la actriz.